1) Tomado de: https://painthealth.wordpress.com/2020/07/15/la-peste-de-milan/?preview_id=4228&preview_nonce=7215fbc544&_thumbnail_id=4229&preview=true
2) Peste de Milán de 1630, recreada como una peste de la Antigüedad en un cuadro de Nicolás Poussin. Tomado de: https://www.paxaugusta.es/2020/04/las-cuarentenas-mas-celebres-de-la.html
3) Triunfo della morte, Palazzo Sclafani, Galleria regionale di Palazzo Abatellis, Palermo (1446), affresco staccato. Tomado de: https://www.giornalepop.it/peste-bubbonica-a-milano-nel-1630/
La peste bubónica es una infección causada por la bacteria Yersinia pestis, que provoca la inflamación de los ganglios infectados en los órganos sexuales y los ojos. Cuando la enfermedad afecta principalmente los pulmones, se conoce como peste neumónica. Los primeros síntomas son similares a los de la gripe y suelen aparecer de uno a siete días después de la exposición a la bacteria. Entre estos síntomas se encuentran fiebre, dolor de cabeza y vómitos. Los ganglios linfáticos inflamados y dolorosos se producen en las áreas cercanas al punto de entrada de la bacteria al cuerpo, y en algunos casos, estos ganglios pueden abrirse y liberar material purulento.
Otro brote que tuvo la peste bubonica fue:
La Gran Peste de Milán (1659 –1631)
Cobra 280000 víctimas.
La peste italiana de 1629-1631 fue una serie de brotes de peste bubónica que tuvieron lugar en el norte de Italia durante ese período. Conocida también como la Gran Peste de Milán, esta epidemia causó la muerte de alrededor de 280.000 personas, especialmente en las ciudades de Lombardía, donde las tasas de mortalidad fueron particularmente altas. Este evento se considera uno de los últimos brotes de la pandemia de peste bubónica que duró varios siglos y que comenzó con la Peste Negra.
La peste fue llevada a la ciudad de Mantua en 1629 por las tropas alemanas y francesas que se desplazaban en el contexto de la Guerra de los Treinta Años (1618-1648). Posteriormente, las tropas venecianas, infectadas por la enfermedad, se retiraron hacia el norte y el centro de Italia, propagando la infección.
En octubre de 1629, la peste alcanzó Milán, el centro comercial de Lombardía. La ciudad papal de Bolonia perdió alrededor de 15.000 habitantes debido a la peste, y las ciudades más pequeñas de Módena y Parma también se vieron gravemente afectadas. Este brote de peste también se extendió hacia el norte, alcanzando el Tirol, una región alpina situada en el oeste de Austria y el norte de Italia.
Otros brotes posteriores de peste bubónica en Italia incluyeron la ciudad de Florencia entre 1630 y 1633, así como las áreas cercanas a Nápoles, Roma y Génova en 1656-1657.
Referencias: